Diferencias de cultura entre España y México según Hofstede
Hoy vamos a explorar las diferencias de cultura entre España y México según la teoría del neerlandés Geert Hofstede. Hofstede fue un académico que empezó a desarrollar un nuevo marco de análisis de las culturas nacionales en los años 60, momento en que era empleado de la famosa empresa IBM. Gracias a las extensas bases de datos de IBM que contenían encuestas realizadas a nivel mundial, Hofstede aplicó sus conocimientos de las ciencias sociales para analizar los datos y así descubrió pautas de similitud que existen a nivel nacional. Me interesa esta teoría porque analiza las culturas de manera sistemática.
En contraste con los métodos modernos que permiten a ciertas organizaciones como Cambridge Analytica/Emerdata de contar con unos presuntos 5000 puntos de datos sobre cada individuo (¡aterrador!), las dimensiones de la cultura de Hofstede analizan a los grupos de personas bajo seis dimensiones. Hoy vamos a comparar España y México con la ayuda de cuatro de aquellas: la Distancia al Poder (PDI), la Aversión a la Incertidumbre (UEI), el Individualismo (IDV) y la Masculinidad (MAS). Cabe mencionar que esta última define a ambos hombres y mujeres. Cada dimensión es valorada del 1 al 100.
Distancia al Poder:
La Distancia al Poder es de 57 en España y de 81 en México, lo cual nos indica que ambos son países jerarquizados, centralizados y con desigualdad en la distribución del poder. España tiende a tener Distancia al Poder, pero es moderada en comparación con México.
Aversión a la Incertidumbre:
Ambos países tienen una fuerte Aversión a la Incertidumbre (España 86 y México 82), lo cual los define como sociedades que buscan seguridad imponiendo más reglas, que buscan certezas filosóficas o religiosas y que valoran los empleos en la administración pública.
Individualismo:
Con respecto al Individualismo, España (51 puntos) es un país colectivista cuando se compara con el resto de Europa: la gente se identifica mucho con su familia. Sin embargo, es individualista en cuanto a las responsabilidades económicas limitadas al individuo con su núcleo familiar. Con sus 30 puntos, México es también colectivista, pero de manera más afirmada. Se define como una sociedad que valora la lealtad a la familia. La importancia de ser respetado dentro del grupo lleva a una cultura del honor en la cual «la ofensa lleva a la vergüenza y a la pérdida de la cara».
Masculinidad:
Con 42 puntos, España tiene una cultura «Femenina»: se valora la colaboración, el consenso, la ayuda a los menos afortunados y se trabaja para alcanzar una mejor calidad de vida. En cambio, con 69 puntos, México es de cultura «Masculina». Se valora una feroz competencia, el heroísmo y no se le pide su opinión a los subordinados. El trabajo es un valor por sí mismo y el éxito se comprueba por una recompensa material.
La teoría de Hofstede no es aceptada universalmente. Escépticos y detractores en el mundo académico han criticado la manera de recoger los datos, los criterios empleados y han contestado que no toma suficientemente en cuenta las variaciones individuales. A pesar de las críticas, las escuelas de negocio del mundo siguen enseñando y aplicando las dimensiones de Hofstede a los recursos humanos y al marketing. Se suele decir que el idioma es el vehículo de la cultura, entonces ¿por qué deberíamos eludir el estudio de teorías de las culturas bajo pretexto que todos los estereotipos fueran fundamentalmente perjudiciales? Cabe recordar que los tópicos son un punto de partida para orientarse en una realidad más compleja. La falta de comprensión puede engendrar un alto riesgo de fracaso en todo proyecto internacional. Creo que el estudio de las diferencias de culturas tiene un gran potencial de ser usado sabiamente para hacer el bien.
Commentaires
Enregistrer un commentaire